"Día tras día, Señor de mi vida, quede delante de Tí, cara a cara. De manos juntas, quedaré delante de Tí, Señor de todos los mundos, cara a cara. En este mundo que es tuyo, en medio de las fatigas, del tumulto, de las luchas, de la multitud agitada, he de mantenerme delante de Tí, cara a cara. Y, cuando mi tarea en este mundo estuviere acabada, oh Hey de Reyes, solo y en silencio, permaneceré delante de Tí, cara a cara. Amén"
reflexiones espirituales cortas,reflexiones espirituales escritas,que es reflexion espiritual,reflexiones espirituales catolicas,reflexiones espirituales para jovenes,reflexiones espirituales cristianas,reflexiones espirituales para el alma,reflexiones espirituales habladas,