Dios omnipotente y eterno, en quien vivimos, nos movemos y existimos, te damos gracias y te bendecimos por que has dado a este servidor tuyo largos años de vida, junto con la perseverancia en la fe y en las buenas obras; Concédele ahora, Señor, que, confortado por el afecto de los hermanos, esté alegre en la salud, no se deprima en la enfermedad, y, reanimado con tu bendición, emplee en tu alabanza el tiempo de su ancianidad. La bendición + de Dios Todopoderoso, que a nadie abandona y que aún en la vejez y las canas guarda a sus hijos con solicitud de Padre, descienda sobre ti. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
reflexiones espirituales cortas,reflexiones espirituales escritas,que es reflexion espiritual,reflexiones espirituales catolicas,reflexiones espirituales para jovenes,reflexiones espirituales cristianas,reflexiones espirituales para el alma,reflexiones espirituales habladas,