Milagrosa y Querida Madre ¡Nuestra Señora Aparecida! Tú que nos amas y nos guías todos los días Tú que eres la más bella de las Madres a quien amo con todo mi corazón, te pido una vez más que me ayudes a alcanzar una gracia. Sé que me ayudarás y sé que siempre me acompañarás hasta la hora de mi muerte. Amén.
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